El Arco de San Sebastián de Aparicio, hecho de cantera, es de estilo barroco con grecas geométricas modeladas en argamasa. Se ubica al costado sureste de la plaza principal y, de acuerdo con la leyenda que reza en el medallón que está en la parte media del arco, fue declarado monumento nacional en 1951.
En lo alto de una pequeña columna al centro del arco había una imagen de San Sebastián de Aparicio, quien era considerado por los dominicos patrono de los transportistas; con ello se hacía alusión a que los viajeros oraban al salir de una villa.
En junio de 1961 un autobús chocó en el lado derecho del arco, lo que provocó un estrepitoso derrumbe. En 1971 el Departamento de Monumentos Coloniales de la República inició actividades para su reconstrucción.
Puedes admirar esta bella pieza de arquitectura en tu próxima visita a Amecameca.
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