Conjunto Arquitectónico Atetelco, Teotihuacán

Atetelco, la escuela de los guerreros

Se ubica al oeste de las pirámides, muy cerca del conjunto Tetitla donde la temática de la pintura mural está dedicada a las deidades y episodios de la vida cotidiana. Aquí se centra en las actividades relacionadas con la guerra.

Por la gran cantidad de murales alusivos a la milicia, se plantea que Atetelco fue sede de una escuela militar o cuartel, habitado entre 450-650 d. C. Las obras pictóricas presentan mucha iconografía relacionada con artefactos cortantes como cuchillos de obsidiana, puntas de flecha y espinas de maguey.

Aquí se conserva una de las mejores muestras de la pintura mural teotihuacana, conocida como La Procesión de Sacerdotes, en el denominado Patio Blanco. En él, se observa a varios personajes de perfil, quienes portan un bastón y, a su lado, un caracol, del cual surge la vírgula de la palabra.

Los individuos que están enmarcados dentro de rombos rojos se han identificado como sacerdotes que están realizando una ceremonia. Debajo de la escena, hay representaciones de cánidos asociados con lobos, así como de jaguares regurgitando un amasijo del cual chorrean gotas y serpientes con tocados de plumas.

Sobresale el mural del Personaje Ave, representado por un hombre disfrazado de águila que porta un escudo. Cuenta con un yelmo de pico, alas alargadas y una cola extendida.

Otra obra maestra es la llamada Ave con polluelos, que es la representación de un águila con las alas extendidas y que carga a 13 crías. “Este animal, también suele relacionarse con cuestiones bélicas”, comenta Ortega. Destacan también, por su presencia repetida y en diversas partes del conjunto, las pinturas de escudos o chimallis, cuchillos curvos de sacrificio, corazones atravesados por flechas, y una representación de Tláloc, en su advocación a la guerra.